Comienza este tramo del capítulo 3 de Gálatas versos 6-18, con estas palabras: Que todos somos bendecidos por la fe de Abraham, a quien Dios dijo que en él serían bendecidas todas las naciones, así los que son de la fe son bendecidos con el creyente Abraham. Todos los que depende de la ley, que se quieren justificar por las obras, están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas que están escritas en el libro de la ley, para hacerlas. Nadie será justificado por la ley, sino por la fe, escrito está: El justo por la fe vivirá. Y la ley no es de fe, porque dice el que hiciere estas cosas vivirá por ellas.
Cristo nos redimió de la la maldición de ley, hecho por nosotros maldición, porque escrito está: "maldito todo aquel que es colgado en un madero" Para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham, alcanzase a todas las naciones, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu Santo. Ahora bien si Cristo nos redimió de la ley, la cual nos condenaba, o nos ponía bajo maldición, ya que por las obras de ley nadie se podría justificar, queda claro que si Cristo al morir por nosotros, levantó la hipoteca que nunca podríamos pagar, ya somos libres de condenación y tenemos vida eterna ( Juan 5: 24)
Todo lo que tenemos que hacer es confiar en Cristo, reconocerlo o aceptarlo como nuestro Salvador y arrepentirnos de nuestros pecados, y si esto hacemos recibiremos la promesa del Espíritu Santo. Entonces ¿tenemos que hacer algo más para ser salvos? ¿Habrán quedado, cosas que tenemos que arreglar para completar la redención? en ninguna manera, porque eso sería volver a estar bajo la ley, y sabemos que todos los que tan bajo la ley están bajo maldición. No debemos tratar de agregar algo más, de lo que no está escrito. ¿Para qué entonces dada la ley? para mostrarnos el pecado y nuestra necesidad un Salvador y Redentor que tomara nuestro lugar muriendo por nosotros o en nuestro lugar, para que podamos ser perdonados y restituido a la gloria que habíamos perdido "por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios" Romanos 3: 23
No hay comentarios.:
Publicar un comentario