EN EL PRINCIPIO

Todas las cosas tienen un principio, un apogeo y un fin,  por esa 2° ley de "termo dinámica," que todo envejece y muere. Aún los astros más grandes del Universo, llevan el mismo destino: nacer, existir y morir. Esto nos lleva a un tema, que desde los albores de las ciencias físicas, ha tenido a los hombres, en vilo, la búsqueda de una respuesta que satisfaga sus ansias de saber: como comenzó y cuando, y como terminará. Ninguna de estas preguntas, tiene una respuesta categórica, la ciencia todavía no ha podido encontrar una explicación; como tampoco tiene un respuesta sobre el espacio y el tiempo. Hay muchas teorías, pero todavía no se ha podido encontrar una explicación: ¿donde termina el Universo y cuando. ¿Entonces que hacemos? Si aceptamos la declaración de Génesis uno, quedaría todo aclarado, claro que esto es un asunto de fe, y como alguien dijo: "la fe tiene razones, que la razón no entiende" Es común que la gente diga: si no veo no creo, pero el asunto es al revés; es necesario creer, para ver; este es el principio de todas las cosas, ¿ acaso los hombres de ciencia no comenzaron con una teoría y cuando acertaron, quedo establecido como una realidad. Esto es en el campo de la ciencia, que nace de la filosofía; pero la fe en lo que Dios ha declarado, nace también de la esa palabra que él ha dicho. La misma palabra de Dios dice: "que la fe viene por el oír y por oír la palabra de Dios" " porque la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve" y agrega: "porque las cosas invisibles de Dios, su eterno poder y Deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio las cosas hechas, de modo no tienen excusas" Estos son los pasajes, Romanos 10:17 ; Hebreos 11:1 y Romanos 1:20. En la próxima seguiremos